Esta semana hay música que es fácil de olvidar, difícil de olvidar y más Italia de lo que esperarías.
Algo nuevo:
Oklou – choke enough [2025]
Escuche choke enough el disco debut de la artista francesa Oklou porque me dio curiosidad algunos comentarios sobre él en Twitter y, bueno, también porque Spotify me lo mostró como una recomendación para mi.
Y… no es un mal disco. En teoría, es un álbum diseñado justo para mis gustos personales, es un grupo de canciones tienen un sonido etéreo con una producción con instrumentos electrónicos inspirada que a veces me suena un poquito al ambient y trip-hop de la década de 1990, por supuesto con toques de hyper pop, porque estamos en la década de los 2020s.
Desafortunadamente, la música en choke enough es poco memorable. La gran mayoría de las canciones fácilmente las puedes olvidar mientras las estás escuchando, pues tienen una producción muy agradable pero genérica. Podría estar escuchando a cualquier otra artista similar y no notaría la diferencia.
Eso no quiere decir que no haya canciones que sobresalen y me han gustado. harvest sky es una colaboración con underscores que suena a hyper pop coquetando a trance; take me by the hand, colaboración con bladee, me da melancolía del 2010… lo cual sólo me recuerda el paso inexorable del tiempo; mientras que la titular choke enough es quizás lo más energética que suena Oklou.
Que dos de las tres canciones que más me han gustado de este disco creo que ilustra porque no me ha encantado. Eso sí, es excelente música para poner como ruido de fondo.
Algo viejo:
Self Esteem – Prioritise Treasure [2021]
En contraste, Prioritise Pleasure es otro disco que me arrepiento de no haber escuchado cuando apareció por lo mucho que lo he disfrutado. Además de que evidencia mi gusto por discos de artistas británicas que han sido nominadas o ganado un premio Mercury, pues la semana pasada hablamos del último material de FKA twigs.
Este es un álbum de pop con melodías enormes e instrumentación discordante pero repleta de una vitalidad contagiosa. El contraste entre voces corales y percusión abrasiva está presente en muchas de las canciones y eso sí que es justo el tipo de cosas que disfruto.
Esa confrontación entre sonidos suaves y estridentes además me parece que temáticamente es muy apropiada, pues las letras de las canciones tocan temas personales y ocasionalmente bastante delicados, como el abuso sexual en I Do This All The Time, pero siempre buscando la fuerza para afrontarlos y en el proceso crecer como persona.
No puedo dejar de tararear el coro de la canción titular, Prioritise Pleasure, que habla sobre la importancia de reconocer el valor que tenemos como personas. Ya es de mis canciones favoritas, no sólo de la semana, sino en general.
Otras canciones que me han gustado mucho son How Can I Help You, The 345 y Hobbies 2, pero ninguna tiene desperdicio.
Muy recomendable para escuchar cuando necesitas recordar que puedes hacer frente a lo que sea.
Algo inusual:
Bomdabash & Eiffel 65 – Heaven [2022]
Me doy cuenta también que muchas canciones inusuales que escucho de alguna manera hacen contacto con la música dance europea de finales de los 1990 e inicios de los 2000.
En este caso, Heaven es una canción de EDM del grupo de Reggae italiano Boomdabash, que usa la melodía y coro de la canción Too Much of Heaven del también italiano grupo de música dance Eiffel 65, mejor conocidos por Blue (Da Ba Dee).
La combinación, de algún modo funciona, y el resultado es una canción ideal para cuando andas domingueando en tu coche o, bueno, tu medio de transporte favorito.
Algo de un videojuego:
Spread The Wings – Garou: Mark of the Wolves [1999]
Al momento de escribir esto se encuentra en curso la beta abierta de Garou: City of the Wolves, la secuela de Garou: Mark of the Wolves, originalmente lanzado en 1999.
¡Veinticinco años después regresa Fatal Fury!
Para celebrar, recordemos el tema musical del protagonista de la saga Garou, Rock Howard, que otra vez me lleva de vuelta al dance europeo de finales de la década de 1990 e inicios de los 2000, pues toma descaradamente la melodía de Children del artista italiano Robert Miles. Hey, también Italia de nuevo.
De verdad, no exagero, lo único que falto fue emular el distintivo sonido de piano del original.
Como sea, el resto de la canción es un tema de protagonista muy pegajoso, como los solía componer el equipo musical de SNK incluso por esas fechas que ya tenía problemas económicos muy fuertes encima.
Esperemos que el futuro de SNK les traiga cosas buenas.
Deja una respuesta